Eulogy

Muchas gracias a todos ustedes por su presencia, apoyo y amor. Se lo mucho que mi mama los apreciaba y valoraba la amistad que tenian con ella, con mi papa y con nosotros, sus hijos.


El dia de hoy no es solo una despedidia pero tambien una celebracion de la vida de Virginia Bastidas de Vega. Mi mama fue bendecida de tantos modos--teniendo a tantas personas maravillosas cerca y que ahora deja para que lamentemos su ausencia y continuemos bendiciendola en nuestros recuerdos.

En su vida fue una buena amiga y tambien fue una hija, esposa, madre y abuela ejemplar. Los recuerdos mas tempranos que tengo, siempre incluyen su mirada tierna, y palabras amorosas, en sus ojos yo siempre era su linda princesita del oriente, Albert era su querubincito y Valente su baby azucarado. A simple vista uno pensaria que fue una mujer tradicional, de su casa, respetuosa hacia su madre, y luego hacia su esposo, pero eso es solo a primer vista, si uno llego a conocerla entonces sabe que fue una mujer que siempre camino por un camino el cual ella forjo a medio de sudor y esfuerzo. Desde muy pequena , ya que su papa murio cuando ella solo tenia nueve anos, ella comenzo a trabajar, como secretaria en el gobierno de Culiacan. para asi poder ayudar a sus 5 hermanos menores. Trabajando en el gobierno paso su adolecensia y siguio trabajando hasta que se convirtio en mujer y finalmente hasta casarse con mi papa, a una edad en la cual ella ya habia gozado de vestidos y zapatos nuevos, perfumes de paris y viajes con amigas. Se caso y muy pronto dedico su vida a su familia. Dejo de comprar prendas caras, remendendando siempre sus vestidos viejos y Aunque nunca pudo continuar sus estudios mas alla de la secundaria siempre nos inculco lo importante que es la educacion, siempre nos decia que solo habia dos cosas que podia dejarnos: Alas y Raices. Las alas vendrian a travez de la educacion y las raices a traves del amor en la cual yacen los cimientos de nuestra familia.

Muchos la recordaran por su sonrisa amable, y su dulce voz, pero yo siempre la recordare como la mujer fuerte, la cual tomo decisiones que requerian valor y valentia. Fue asi como ella me dio permiso para irme estudiar tan lejos a los 14 anos, en la escuela donde yo estudie los administradores estaban sorprendiddos de que mi mama fuera tan moderna. Aunque le causo bastante dolor lo hizo por el bienestar de mi futuro. A mi mama, mis hermanos y yo le debemos todo lo que somos, lo que no hemos podido ser solo se debe a la valentia que nos falta y que a ella siempre le sobro. Tambien la recordare como una mujer que siempre tenia que tener la untima palabra, aunque lo hacia de una manera suave y con elegancia sin que uno se diera cuenta. Un ejemplo de esto es que a cada uno de sus tres hijos dejo una ultima carta, la carta mia y tambien el sobre estan dirigidos, escritos por su puno y letra a Elizabeth Vega Carroll, de esa manera ella me da a entender por ultima vez de lo mucho que queria que yo me cambiara el apellido, ya que al casarme conserve el de Vega, cosa que no fue de su agrado porque parece que ni estoy casada.

Tambien me dijo que le gustaria que en su funeral recitara un poema. Hoy en honor a la mujer que me arrullo en sus brazos y la cual se lleva un pedazo de mi corazon junto con los recuerdos de mi nacimiento, mis primeras palabras y tantas cosas que solo ella conocia, le dedico Gratia Plena, de Amado Nervo a mi madre.

Gratia Plena

Todo en ella encantaba, todo en ella atraía;
su mirada, su gesto, su sonrisa, su andar...
El ingenio de Mexico de su boca fluía.
Era llena de gracia como el Avemaría;
¡quien la vio, no la pudo ya jamás olvidar!

Ingenua como el agua, diáfana como el día,
rubia y nevada como margarita sin par,
el influjo de su alma celeste amanecía...
era llena de gracia como el Avemaría;
¡quien la vio no la pudo ya jamás olvidar!

Cierta dulce y amable dignidad la investía
de no sé qué prestigio lejano y singular.
Más que muchas princesas, princesa parecía;
era llena de gracia como el Avemaría;
¡quien la vio no la pudo ya jamás olvidar!

Yo gocé el privilegio de encontrarla en mi vía
dolorosa; por ella tuvo fin mi anhelar,
y cadencias arcanas hallará mi poesía,
era llena de gracia como el Avemaría;
¡quien la vio no la pudo ya jamás olvidar!

¡Cuánto, cuánto la quise! Por muchos años fue mía;
pero flores tan bellas nunca suelen durar.
Era llena de gracia como el Avemaría
y a la Fuente de Gracia, de donde procedía,
se volvió... como gota que se vuelve a la mar.